March 10th, 2024
Contrario al sentido común, tomar buenas decisiones personales es difícil. Debería ser un proceso relativamente fácil de llevar a cabo, colocas en una balanza lo positivo versus lo negativo y en función del resultado tomas la decisión. Sin embargo, la mayoría de las veces aún a sabiendas del mejor resultado, tomamos la decisión equidistante. Resulta que tomar buenas decisiones personales tiene un componente extrínseco a las opciones situadas en la balanza, un componente que es inherente a la persona, su auto-percepción/valoración, su resiliencia y la voluntad de hacer las cosas para cambiar.
Para mí, Al Pacino lo ejemplifica fantásticamente en la película “Perfume de mujer” cuando dice: I always knew what the right path was. Without exception, I knew, but I never took it.